miércoles, marzo 30, 2011

DE REGALITOS

Mirad que dos regalitos me hizo Estrella Matutina. Uno por mi cumpleaños, el otro porque si... porque yo lo valgo, jajajajajaja.... No me digais que no mola la camiseta. Me encantaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa....

Y esto es una bombonera totalmente hecha por él ¡qué manitas tienes niño!!! y no sólo con esto ;)

Y aquí la teneis por dentro aunque ya no queda ni un bombón. Bueniiiiiiiiiiiiiiiiiiiisimos, pero de todos el que màs bueno estaba eras tú, ñam ñam ñam...

Y como aquel día no me dejaste darte las gracias, te las doy por aquí. Muchas gracias Estrella Matutina.

jueves, marzo 24, 2011

EL CUENTO DE LAS MIL Y UNA NOCHES (SEGUNDA PARTE Y FINAL)

Así fueron pasando los días y aquellas miradas, aquellas insinuaciones y aquel juego se fué volviendo cada vez más "peligroso". Llegaron las fiestas del pueblo y lógicamente el no trabajaba pero siguió yendo al restaurante cada día durante los cuatro que duraban. En esta ocasión además de ir al mediodía también lo hacía por las noches. Entonces yo trabajaba más horas de lo normal, descansaba un poco por la tarde y volvía a trabajar hasta bien entrada la madrugada. Todo el "rollo" que había entre nosotros se incrementó mucho más. La noche, yo detrás de la barra mientras él se tomaba algún que otro cubata... la situación invitaba muy mucho a lo que al final acabó pasando.
Era la penúltima noche de fiesta y allí estaba él otra vez al otro lado de la barra. Me invitó a alguna copa y yo me dejaba invitar, seducir...
Llegó la hora de cerrar, el bar prácticamente ya estaba vacío. Salí fuera para bajar una de las persianas y de repente, no sé ni como pasó, me encontré apoyada contra la pared con sus labios en los míos. Supongo que al alcohol tuvo algo que ver porque ya os digo, no recuerdo muy bien como llegamos a eso, pero lo que si recuerdo es su manera de besarme, imposible de olvidar. No llegué a casa hasta bien entrado el día. Una noche mágica en la que me sentí como una princesa, porque así era como me hacía sentir, tanto esa noche como los dos meses que estuve saliendo con él. Había tanta mágia.....
No paraba de repetir que me quería, que lo tenía hechizado pero yo... no sé, más que amor creo que lo mío era fascinación, deseo... Me sentía muy halagada, muy atraida hacia él pero nada más.
Llegó incluso a proponerme irnos a vivir juntos. Me lo ofreció todo... aquello era una locura... pero al final decidí no seguir con él. Como os he dicho antes lo que yo sentía no era amor o por lo menos eso creí en su momento. Me dijo que lo entendía, que respetaba mi decisión pero que le rompía el corazón. Y un tiempo después volvíó a su país.
Aunque simplemente pertenece a mi pasado jamás he podido olvidar sus ojos, su mirada... ni aquella história, corta pero intensa, tan mágica como "Un cuento de las mil y una noches".





No lo puedo evitar, es escuchar esta cación y acordarme de todo aquello. No es que pasara así exactamente pero si me lo recuerda bastante. Además que este tema sonaba mucho por aquella época.

sábado, marzo 19, 2011

EL CUENTO DE LAS MIL Y UNA NOCHES (PRIMERA PARTE)

O más bien "Mi cuento de las mil y una noches particular". La história con aquel chico árabe que mencionaba al final del post anterior.
Como ya comenté él era albañil y trabajaba en una obra a escasos metros del restaurante donde trabajaba yo. Recuerdo que la primera vez que lo vi ya me llamó mucho la atención. Era muy guapo, con los rasgos típicos de los árabes, unos ojos negros preciosos... inquietantes y cautivadores al mismo tiempo.
Iba a comer cada día al restaurante con los demás compañeros de trabajo y desde el primer momento noté como me miraba, aquellos ojos negros no se apartaban de mí, a veces incluso podía sentirlo a mis espaldas. Pero no me molestaba, aunque en ocasiones podía sentir como me desnudaba con la mirada, al contrário, más bien me sentía halagada.
En el restaurante había colgada una pizarra con el menú y yo sólo tenía que pasar por las mesas y tomar nota de lo que los clientes querían para comer para luego servírselo. Cuando me dirigía a él siempre se repetía la misma escena:
- ¿Qué quieres de primero?
- No sé..... ¿qué hay?
- Lo tienes en la pizarra.
Y sin apartar sus ojos de los míos me contestaba:
- Prefiero que me lo digas tú, me gusta escuchar tu voz.
Como os he dicho esto se repetía cada día. Al principio tal vez me incomodaba un poco (estaba todo el restaurante lleno de gente y sin ir más lejos sus compañeros en la misma mesa) pero al final incluso me gustaba aquella espécie de juego. Me decía todo tipo de piropos pero en ningún momento fué grosero. Un día incluso me invitó a cenar pero lo rechacé. No sé..... aquello me parecía un poco fuerte y además hay que tener en cuenta que por aquellos entonces yo estaba con mi ex, sólo que lo habíamos dejado durante un tiempo por problemas que ahora no vienen al caso, pero tengo que reconocer que me tentaba, me tentaba y de que manera.

miércoles, marzo 16, 2011

A GRANDES MALES GRANDES REMÉDIOS

Corría el año 1993, entonces yo tendría unos 20 años y trabajaba de camarera en un restaurante. La verdad que estaba bastante a gusto, eran muchas horas (festivos incluídos) pero el sueldo no estaba mal, con los dueños tenía mucha amistad y no tenía que desplazarme para ir a trabajar porque estaba justo al ladito de mi casa. El caso es que tenían una hija unos dos años menor que yo, que entre una cosa y otra empezó a cogerme manía. Porque muchas veces los clientes se pensaban que la hija era yo: "dile a tu padre que tal y tal" "no es mi padre, yo sólo trabajo aquí". Porque sus padres pues la verdad que si me trataban como si fuera hija suya. Porque la mayor parte de veces los clientes preferían que los atendiera yo a que lo hiciera ella (es que tendríais que haber visto la cara de vinagre que tenia la tía) Y por esto y alguna cosa más pues acabó odiándome. Yo no tenía culpa de todo eso y en ningún momento intenté ocupar el lugar de nadie pero empezó a meterse conmigo, a decirme ciertas cosas bastante desagradables y todo esto en horas de trabajo. Yo intentaba disimular al máximo para que la gente no lo notase y la verdad que casi siempre lo conseguía pero claro, se creó un clima de tensión entre ella y yo bastante insoportable. Hasta que un día me cansé, me la encontré por la calle y no lo pensé dos veces:
- ¿Me quieres decir por qué te comportas así?
- Oye mira, déjame en paz ¿vale?
No me gustó su tono, la verdad que ya no me gustaba nada ella, la cogí por la pechera, la acerqué a mí y le dije:
-Mira nena, te voy a decir una cosa y quiero que te quede bien claro. La próxima vez que te vuelvas a meter conmigo mientras estoy trabajando o simplemente me mires de una manera que a mí no me guste..... en cuanto te vuelva a pillar en la calle te piso la cabeza ¿te ha quedado claro?
Se puso muy nérviosa, se le saltaban las lágrimas y me dió tanta pena que la solté pegándole un pequeño empujón y me fuí de allí. Claro, la niña era una cobarde que sólo se atrevía a molestarme en mis horas de trabajo, donde sabía que yo poco podía hacer.
Como me imaginé le fué con el cuento a su padre y unas horas más tarde lo tenía picando al timbre de mi casa:
- Ya no hace falta que vayas a trabajar, no quiero verte más por allí.
Intenté explicárselo pero no me dejó.
- Dentro de dos días puedes pasar a buscar la cuenta.
Un tiempo después me enteré que al final les había contado que si, que era ella la que había empezado todo aquello, que algún cliente les había dicho que algo habían notado y entre eso y que ellos mismos también habían visto alguna cosa pues a los dos días volvía a tener al padre en mi casa:
- Mira, es que tienes que entenderlo, es mi hija y me puse muy nervioso. De verdad que no quería decir lo que dije. Ya hemos hablado con ella seriamente, es que no sé..... te ha cogido mucha manía pero te aseguro que esto no va a volver a pasar. Vuelve a trabajar, anda. Lo siento, de verdad que siento mucho todo esto.
Volví y desde entonces hasta que dejé de trabajar allí (por otros motivos) todo como una seda y sin problema. La hija hablaba lo justo conmigo y la mitad de veces ni se atrevía a mirame a la cara. Vale, seré un poco mala pero en cuanto tenía oportunidad me paseaba frente a ella con aires de victória, jajajaja...
Sé que me arriesgué a perder el trabajo pero no estaba dispuesta a que una niñata de papá me humillara y me hiciera sentir mal. Lo que yo digo: a grandes males grandes remédios.

Nota: la verdad que trabajar en un sitio así te hace conocer mucha gente, vivir muchas histórias y ahora con todo esto me ha venido a la mente una muy especial con un chico árabe. A aquella história en su momento la llamé (y sigo llamándola) "El cuento de las mil y una noches". Era un albañil que iba cada día a comer al restaurante y la verdad que fué algo muy bonito. Tal vez me anime y un día os la cuente.

sábado, marzo 12, 2011

EL DÍA DESPUÉS.......

Y todavía con el sabor de tus labios en los míos, con el olor de tu piel en mi piel, con tus palabras resonando una y otra vez en mis oidos y con el fuego que han encendido tus manos en mi piel. Y otra vez no he podido resistir la tentación.... y si por esto ardiera en los infiernos con gusto ardería.... y si volviera a nacer repetiría.....

viernes, marzo 04, 2011

TORMENTA DE IDEAS (EDICIÓN ESPECIAL ÁNGEL Y DEMÓNIO)

AVISO: si quereis evitaros leer paranoias y gilipolleces mejor no sigais leyendo.

-¿Realmente eres consciente de lo que estás haciendo?
- Por supuesto que lo eres y eso es lo que más te jode.


- ¿Te das cuenta que después de lo que has hecho tal vez ya no haya marcha atrás?
- Has hecho lo que querías hacer ¿acaso no se trata de eso?

- ¿Crees que los demás merecen esto?
- ¿Y tú? ¿qué es lo que mereces tú? Nena, aprovecha y disfruta lo que la vida te ofrece. Que importa lo que merezcas si realmente no mereces nada, entonces ¿qué más da?


- ¿Por qué abriste esa puerta si sabías que no debías? y no sólo la abriste si no que le pegaste una patada derrumbándola. Nadie te la abrió y te hizo pasar. Lo hiciste tú solita. ¿Qué harás ahora? ¿ponerla otra vez en su sitio? ¿crees que eso es posible?
- Sencillo, la abriste porque te va el peligro... porque disfrutas con lo prohibido. ¿Para qué quieres volver a cerrarla? ¿te vas a arrepentir ahora? Recuerda: TÚ NUNCA TE ARREPIENTES DE NADA.

- Si, pero esta vez te has pillado los dedos con esa puerta y bien pillados...


- ¿Te das cuenta que esto ya no es un juego? ¿o que tal vez aunque no lo supieras no lo ha sido en ningún momento?
- ¿Y quien está jugando?


¿Conoceis este vídeo? ECDL "Así vas a acabar" "No querida, tú ya estás peor que ese"